Estos son algunos de los motivos por los que debes recurrir a la impresión digital:

• Rápida: No trabaja con tintas por lo que no es necesario esperar a que sequen. Una circunstancia que, además de dar el mismo tono y estabilidad de color a toda una tirada, permite que no haya que esperar para manipular el trabajo sin arriesgarse a estropearlo.
• Barata: Aunque a algunos les cueste más reconocerlo, este es uno de los motivos que nos llevan a elegir uno u otro proveedor o decantarnos por un artículo promocional concreto. Pues bien, la impresión digital es más barata que las técnicas anteriores. Y el ahorro no debe medirse simplemente en dinero. Porque al no trabajar con tinta se eliminan procesos como el secado y se gana tiempo.
• Flexible: Aumenta el tiempo disponible para ‘parar las rotativas’. Es una de las ventajas más importantes de la impresión digital. Además de cambios de última hora ofrece también la posibilidad de incluir detalles que hagan único el trabajo hasta el último momento.
• Pequeñas tiradas: Al no necesitar de la creación de una serie de planchas con las que marcar el trabajo de las impresoras, la impresión digital hace que no sea necesario recurrir a grandes tiradas para que un encargo nos salga rentable. Este tipo de técnica, por ejemplo, favorece que a tu evento no falte de nada. Que no sea de gran magnitud o que vaya a acudir un grupo reducido de personas ya no es una excusa para no contar con lo mejor.
• Mejores acabados: Con técnicas anteriores siempre se corría el riesgo de que la tinta no ofreciese un acabado adecuado si no se dejaba secar lo suficiente. Un problema que con la impresión digital ha pasado a la historia.